miércoles, 9 de abril de 2014

ELECCIONES EUROPEAS

Del 22 al 25 de Mayo se celebrarán en nuestro país, unas elecciones transnacionales con las que los españoles se sientes ya familiarizados, les hablo de las elecciones al parlamento europeo de la que saldrán los candidatos para la octava legislatura de la historia de este organismo.
Un año más a los medios de comunicación y a los políticos se les llenará la boca de argumentos como el de responsabilidad ciudadana, actitud democrática, ensaltaciones europeístas… Nuestros buzones se inundarán de propaganda política de los partidos mayoritarios, exponiéndonos sus recetas para darle voz a los problemas de España, desde dentro del aparato burocrático Europeo.
Todo esto de la Unión Europea suena muy bien y en ocasiones, sobre todo en nuestra región, nos hace parecer mendigantes, en cuanto hemos recibido muchas subvenciones de la Unión Europea, al tener la consideración de zona pobre.
Pero no creáis amiguitos que estas limosnas son gratis, ni mucho menos, el capitalismo no regala nada y su ideología es el máximo beneficio. La Unión Europea se fundó bajo los parámetros estrictamente capitalistas continuando en la actualidad bajo estos mismos parámetros, aunque con una forma más acabada.
El germen de la Unión Europea se concibió fuera de sus fronteras, al otro lado del atlántico, en un país llamado EEUU que por casualidad es el máximo impulsor de las doctrinas liberales.  Después de la Segunda Guerra Mundial,  Europa quedó arruinada económicamente, por lo que el entonces secretario de estado norteamericano George Marshall , propuso un plan (plan Marshall) para ayudar a la reconstrucción de Europa.
Para recibir este dinero EEUU estableció como condición previa la coordinación de los países europeos, siendo materializada esta coordinación, en el tratado de París de 1947 y creándose el primer proyecto europeo.

Pero los EEUU no eran una organización de beneficencia, si no que buscaban un interés propio en el dinero invertido, en primer lugar apartar a estos países de la órbita de la URSS, ya que los países del Este con el apoyo soviético rechazaron estas ayudas convirtiéndose en países satélites rusos, al igual que el Plan Marshall convertía a los países del oeste en satélites americanos, empezando así la Guerra fría y la política de bloques. Aflorarán en el Este una serie de dictaduras comunistas controladas por Moscú y en la parte occidental se instaurarán Democracias Liberales en la órbita de EEUU, excepto el caso de España con la dictadura franquista,  la que también será apoyada  por los yanquis debido a necesidades estratégicas (Franco, el gendarme de occidente), por lo que podemos ver la hipocresía del ideal democrático estadounidense.
En segundo lugar, esta ayuda se ejecutará ante la penuria europea y la imposibilidad financiera de comprar productos norteamericanos, por lo que sus frutos repercutirán directamente en las arcas de las grandes multinacionales americanas que se implantarán en estos países.
El Plan supuso  una ayuda de 13.000 millones de dólares entre 1947 y 1952. El éxito del plan fue esencial para la recuperación económica y el asentamiento de los regímenes democráticos en Europa Occidental, además de prevenir la expansión del comunismo en países donde el Partido Comunista adquiría fuerza.
Estos son los orígenes, podría seguir hablando de su formación desde la CECA a la Unión Europea, de su administración, de sus instituciones, de sus diferentes tratados, etc., pero no es el objetivo de este artículo, aunque sería interesante en el futuro realizar un artículo sobre la formación de la Unión Europea.
Mirándola desde la actualidad, no podemos obviar, que la Unión Europea y sus fondos han beneficiado enormemente al Estado Español, en especial a Extremadura, pues con fondos europeos se han construido infraestructuras, se ha fortalecido el sistema económico, el sistema bancario…
 Pero ¿A qué precio?

Con el tratado de unión económica y monetaria del año 1993 entro en vigor la libertad de mercancías dentro de las fronteras europeas, lo que provocó la libre circulación de mercancías, capitales y la libre circulación de las personas. Este principio es uno de los pilares de las doctrinas liberales, como no podía ser de otra manera en un Estado Supranacional capitalista.
Este tratado que en un principio parece positivo, en la práctica no todo es color de rosa, pues aunque no soy ni mucho menos un especialista en la materia, puedo afirmar que por ejemplo en el caso de la libre circulación de capitales se torna peligroso fomentando los paraísos fiscales como puede ser el caso de Suiza.
En cuanto a la libre circulación de personas también quiero establecer un matiz, pues por ejemplo en el caso de los rumanos (ciudadanos europeos legítimos), no se ha respetado en muchos casos este principio. Por otro lado, no hace falta fijarnos en los rumanos, solo hay que salir a Europa para ver cómo se nos trata a los ciudadanos del sur (Españoles, Portugueses, Italianos, Griegos…), para ellos solo somos ciudadanos de segunda , solo hay que ver el término despectivo que nos han inculcado: P.I.G.S.
Otro hito fundamental en la historia de la UE fue la introducción del euro en enero del 2002, una moneda común para todos los países miembros que facilita enormemente las transacciones comerciales. Pero ¿Qué inconveniente tiene? Pues desde mi punto de vista como ciudadano común tiene enormes inconvenientes, primero es una moneda que no controlan los países, si no el Banco Central Europeo, por tanto los Estados de la UE carecen de política monetaria.  En épocas pasadas, ante una crisis, el Estado podía responder devaluando su moneda, aunque también esto es peligroso como por ejemplo ocurrió con el marco alemán en la República de Weimar (Alemania), actualmente el Estado no tiene esta competencia pues esta es función del Banco Central Europeo.
Siguiendo con el euro, solo hay que hay que buscar un poco en la memoria colectiva de la gente cuando le sacas el tema de la peseta, se producen comentarios como antes con 1000 pesetas hacías malabares, una cerveza valía 100 pesetas, un paquete de tabaco 200 pesetas… Nos vendieron un redondeo al alza que afecto enormemente a nuestros bolsillo, subiendo el precio del dinero desproporcionadamente al de los sueldos, por lo que no fue un redondeo, esto fue claramente un atraco a mano armada.
Pero a mi juicio, el gran problema que nos viene de Europa es la política económica, podemos decir que este país no tiene política económica real, esto es un problema gravísimo, ya que esto conlleva la pérdida de soberanía, característica fundamental de cualquier Estado.
Da igual que gobierne el Partido Popular, el Partido Socialista, Izquierda Unida o cualquier otro, mientras España siga adherida a estos tratados la política económica la marcará la Unión Europea y por consiguiente Alemania que es el Estado más fuerte de la Unión. No os engañéis, la diferencia en votar a la izquierda o la derecha se puede materializar en algunas políticas sociales, pero en economía manda la señora Angela Merkel, porque como dice un dicho catalán “la pela es la pela”. Teniendo en cuenta que la economía es el pilar básico de un Estado, porque la mayoría de las decisiones en un sistema capitalista, si no todas, emanan o tienen que ver con la economía, podemos afirmar que no tenemos soberanía real.


Dejando la economía a un lado, por último quiero hablar un poco de los partidos políticos que se están configurando para estas elecciones europeas, es preocupante y alarmante el crecimiento de extrema derecha en los países europeos, partidos xenófobos y neonazis que aparecen favoritos o con mucha fuerza en las encuestas.  Hablo de partidos como Le Pen (Francia), Amanecer Dorado (Grecia), Forza Nova (Italia), Partido de la Independencia (Reino Unido)… Estos partidos son una amenaza para la estabilidad democrática ya que en sus consignas claman actitudes violentas y xenófobas.
Otro problema de gran calado político, que en el futuro materializaré en un artículo, es la crisis ucrania donde se ha producido un golpe de Estado, apoyado por la UE y EEUU para sus propios intereses, para implantar un régimen de extrema derecha. No quiero extenderme en esto, pues necesita un capítulo aparte,  solo establecer unas preguntas ¿Tan grandes son los intereses como para tener una guerra en el mismo corazón de Europa y en las mismas fronteras de la UE? ¿Se puede ser demócrata y defender un gobierno de extrema derecha? ¿No han pensado por un momento que si esto se va de las manos podría afectar a los ciudadanos europeos?
En fin, para acabar no es mi intención con esta entrada hacer ningún tipo de boicot a las elecciones europeas, cada uno es libre de votar lo que quiera y por la opción política que quiera, como lo es de no votar. Solo es mi intención defender, que cada persona que vaya a votar este mayo, esté informada y sepa por lo que está votando, este es mi punto de vista pero pueden existir infinidad de puntos de vista contrapuestos a este y no por ello no ser válidos, esa es la libertad: elegir.

                                            


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